Si tengo que elegir una ensalada para el invierno, sin duda mi preferida es
esta. Si me dejasen la prepararía todos los días porque me parece el complemento perfecto para los platos de carne y ave. Y bueno, ya puestos, me da igual que tenga un plato de pescado. No es la primera vez que la naranja y el
besugo van juntos de la mano al horno. Y se llevan muy bien por cierto. Así que poner la ensalada encima de una rebanada de buen pan era algo que tenía que llegar en cualquier momento. Buen pan. Ese es otro tema. Buen pan. Desgraciadamente no encuentro buen pan a diario. No abundan esas hogazas grandes de miga prieta que piden a gritos que te las lleves a casa y les pongas cosas ricas encima. Vale, si no encontramos pan decente vamos a hacerlo nosotros ¿te parece?
Aquí es cuando entran ganas de salir corriendo ¿verdad? Yo pensaba que hacer pan era difícil, muy difícil, y resulta que no lo es tanto. Sobre todo si sigues las instrucciones de Ibán Yarza ya que este pan lo vamos a hacer siguiendo su receta para pan en cazuela. Sale, de verdad, que sale. Mira que soy un desastre para las masas y siempre tengo dudas sobre si necesitará más harina, más agua, habrá levado lo suficiente. En fin, un mar de dudas. Pero este te garantizo que sale. Y además no se tarda tanto. ¿Nos ponemos a ello?
Ingredientes para el pan en cazuela:
Harina de fuerza 500 gr
agua 325 gr
sal 10 gr
levadura fresca 0,5 gr (0,2 de levadura seca)
Y 100 gr de masa vieja. Vale no hemos hecho pizza ni pan así que no tenemos ni un gramo de masa en la nevera. ¿Entonces no podemos hacer el pan? Sí, sí podemos porque Ibán Yarza nos da la solución. Mezclamos 65 gr de harina, 35 gr de agua y 2 gr de levadura. Ya está, ya podemos empezar.
Mezclamos todos los ingredientes, menos la sal, incluyendo la masa vieja (o la que acabamos de preparar) y dejamos reposar media hora. Debes tener una masa pegajosa. Transcurrida la media hora, añadimos la sal y empezamos a amasar hasta que tengamos una masa suave y sedosa. Tardarás unos diez minutos más o menos.
Untamos un bol con aceite y dejamos fermentar unas tres horas o hasta que la masa se haya hinchado y esté fofa. La pasamos a la mesa y hacemos una bola con ella sin sacarle todo el aire de la fermentación. Dejamos que repose una hora sobre la mesa con la doblez hacia abajo.
Mientras habremos precalentado el horno a 250º con la cazuela y la tapa dentro. Sacamos la cazuela y la tapa y metemos el pan con la doblez hacia arriba y cocemos unos 15 minutos tapado. Bajamos el horno a 200º, destapamos el pan y seguimos hasta que llegar a los 50 minutos de cocción.
Sacamos el pan de la cazuela con cuidado y dejamos que se enfrie.
Ya tenemos el pan listo y ahora hacemos nuestras tostas. Para ello necesitamos:
4 rebanadas de pan
2-3 latas de sardinas
3 naranjas grandes
1 bulbo de hinojo
alcaparras
tomillo
Tostamos las rebanadas de pan mientras preparamos la ensalada.
Para ello pelamos las naranjas asegurándonos de que retiramos toda la piel blanca que cubre los gajos para que no amargue. Cortamos las naranjas en gajos y los ponemos en una fuente. Añadimos las sardinas, lo más enteras posible, junto con el aceite de la lata si es de oliva, el hinojo cortado en juliana fina, alcaparras y tomillo. Salamos y repartimos sobre las rebanadas de pan caliente.
A disfrutar.