¿Existe la máquina del tiempo? Para nosotros, sí. Todos los meses hacemos un viaje al pasado para entender cómo nacieron las recetas que nos son tan familiares y conocer a las personas que las divulgaron.
¿Marcamos las coordenadas de nuestro viaje? Marchando, entonces. A ver, a ver. Nos vamos al siglo XIX, a Italia y allí tenemos una cita con Pellegrini Artusi. ¿Con quién? Con el autor de La science in cocina e l'arte di mangiar bene publicado en 1891.
El señor Artusi es considerado el padre de la cocina italiana moderna. Escribió el libro después de haber viajado por toda la geografía italiana y con la esperanza de unificar el país a través de la cultura gastronómica. Durante sus viajes anotó las recetas y sus experiencias para, como hemos dicho, publicar su libro ayudado por Marietta Sabatini.
Aunque el reto hoy va dedicado a Pellegrini Artusi, me gustaría dedicarle unas líneas a Marietta porque sin ella, quizás, no se habría publicado este libro de cocina. Marietta trabajaba como su ama de llaves y aunque ella se consideraba como una "pequeña y humilde mujer" fue muy importante en la vida de Pellegrini no solo llevando su casa sino cocinando todas las recetas y asistiéndole en todo lo que nuestro protagonista necesitaba.
De las 790 recetas que podemos encontrar en el libro, he elegido este pollo campesino que está buenísimo. Vas a necesitar muy pocos ingredientes.
Veamos la receta original de Pellegrini Artusi:
Coge un pollo y pégalo con unas ramitas de romero y un diente de ajo dividido en cuatro o cinco trozos. Ponerlo al fuego con un poco de manteca de cerdo y salpimentarlo por dentro y por fuera. Cuando esté dorado por todos los lados, añadir los tomates picados, quitar las semillas y, cuando se hayan desintegrado, mojar con caldo o agua. Dora unas patatas crudas cortadas en gajos en aceite, manteca o mantequilla, y dejar que tomen sabor al mojar el pollo y servir como guarnición. Sustitutya la manteca de cerdo por mantequilla si desea un sabor más delicado.
Como puedes ver en las fotos no he seguido la receta original y he hecho los siguientes cambios:
en vez de un pollo entero, cociné un pollo en trozos y sustituí la manteca por aceite.
¿Repetiré la receta? Sin duda. Es una de esas recetas que te hacen sentir y quedar bien porque ¿a quién no le gusta un guiso como este? Es sencilla, fácil y no tiene complicaciones ninguna. Además puedo imaginar a esa "pequeña y humilde mujer" preparándola en la cocina.