jueves, 12 de junio de 2014

CLAFOUTIS DE CIRUELAS Y CHOCOLATE



Y aquí está el postre que os prometí el lunes pasado. Un postre que llevo queriendo hacer algo más de un año, que es el tiempo que hace que llegó a mis manos el libro de Seasons de Donna Hay. El verano pasado se me escapó pero si algo tenía claro es que este año lo íbamos a probar y la excusa perfecta se presentó en forma de un regalo delicioso, una bolsa de ciruelas de las de verdad. No de las que compramos en el súper, no, estas vienen con su picados de los pájaros y su pinta algo feúcha. Y ¿quién se iba a resistir combinar las ciruelas y esa masa cremosa de chocolate? Aquí, en este blog, somos débiles y, sinceramente, no hemos podido.




Ingredientes:

50 gr de harina tamizada
25 gr de cacao tamizado
75 gr de azúcar glas tamizada
1 cucharadita de extracto de vainilla
3 huevos
250 ml de nata
175 gr de chocolate picado con un cuchillo
6 ciruelas cortadas a la mitad y sin el hueso

Precalentamos el horno a 180º y engrasamos el molde que vayamos a usar. Donna Hay sugiere dos de 13 cm pero yo lo hice en unas fuentes pequeñas.




Por un lado mezclamos en un cuenco la harina, azúcar y cacao. Por otro lado mezclamos los ingredientes líquidos para después integrarlos todos. Añadimos el chocolate picado y vertemos la masa en el molde.

Ponemos las ciruelas y llevamos al horno durante 20-25 minutos o hasta que al pincharlo con un palillo este salga limpio.

Así de fácil y rápido. ¿Te podrás resistir o caerás en la tentación?




lunes, 9 de junio de 2014

ESTA NO ES UNA ENSALADA DE PASTA MÁS





No. Esta es "la ensalada de pasta" de este verano. Te lo dice una persona a la que le encanta la pasta pero las ensaladas de pasta no es que le entusiasmen demasiado. ¿Por qué? No tengo ni idea, solo que no me interesan mucho. Perdón, no me interesaban porque desde que esta ensalada entró en mi vida, mi percepción sobre ellas cambió. Tiene todos los ingredientes que me pueden gustar, una vinagreta hecha con miel que es una maravilla, tomates secos, aceitunas negras, queso feta, tomillo y albahaca. El verano en tu plato.

Ingredientes:

300 gr de macarrones
1/2 cebolla roja picada
tomates secos en aceite
100 gr de aceitunas negras
200 gr de queso feta
tomillo fresco
100 gr de bacon
rúcula
albahaca
1 diente de ajo
3 cucharadas de vinagre
1 cucharadita de miel
6 cucharadas de aceite de oliva




Vamos a empezar a preparar la vinagreta para aliñar la ensalada. Para ello machacaremos el diente de ajo en el mortero y luego lo pondremos en un bol con las tres cucharadas de vinagre. Dejamos 15 minutos y retiramos. Añadimos la miel, sal, aceite de oliva y emulsionamos. Reservamos.

Mientras la vinagreta reposa cortamos el bacon en dados pequeños y los ponemos en una sartén a fuego fuerte para que se doren y suelten  gran parte de la grasa que tienen. Una vez dorados y crujientes, los dejamos sobre papel absorbente para que terminen de soltar  grasa. Reservamos.




Cocemos los macarrones en abundante agua con sal hasta que estén al dente. Hacía mucho tiempo que no cocía macarrones, siempre suelo ir directamente a por los tallarines o espaguetis y se me había olvidado el olor que tienen al cocer. Es diferente del otro tipo de pasta, curioso. Bien, los macarrones ya están listos, los escurrimos y echamos en la fuente en la que vayamos a servir la ensalada.

Los aderezamos con la vinagreta y añadimos la cebolla picada, los tomates, aceitunas y tomillo. Salamos e incorporamos el resto de ingredientes.

Ya verás como no es una ensalada de pasta más.
No te pierdas el postre del jueves.

jueves, 5 de junio de 2014

MUFFINS RELLENOS DE MERMELADA DE FRESAS AL CAVA




Y esta es la última receta de fresas que os dejo por esta temporada. Creo que las hemos aprovechado bastante y hay que cederle el paso a las cerezas y melocotones que ya están haciendo cola para aparecer por este blog. Me encanta cocinar fruta, tenéis muchos ejemplos en este recetario on line, y sobre todo incluirlas en bizcocho y muffins. Esta vez he elegido esta mermelada de fresas al cava porque he pensado que este fin de semana nos merecemos algo especial después de una semana de duro trabajo. Y si pensamos en algo especial el cava o champán siempre andan cerca. Darle un bocado a estos muffins y encontrarte la mermelada en medio o donde sea, porque acaba repartiéndose por toda la masa, es un pequeño placer que podemos disfrutar en el desayuno. Seguro que después el día sigue trayendo momentos especiales. O al menos vamos a creerlo.


Ingredientes:

75 gr de aceite de girasol
150 gr de yogur natural
1/2 cucharadita de extracto de vainilla
2 huevos batidos
275 gr de harina bizcochona
1/2 cucharadita de bicarbonato
una pizca de sal
100 gr de azúcar
75 gr de mermelada de fresa al cava




Hacer muffins es muy muy fácil y no supone ningún esfuerzo. Como siempre que hacemos una receta de repostería, empezamos precalentando el horno a 180º.

Mezclamos el aceite de girasol, extracto de vainilla y huevos en un bol.

En otro bol mezclamos la harina, azúcar, bicarbonato y sal. Añadimos los ingredientes líquidos a los sólidos y mezclamos lo justo, solo para que se integren los ingredientes. Es normal que queden algunos grumos pequeños de masa.




Ahora que ya tenemos la masa preparada procedemos a rellenar las cápsulas para muffins. Echamos una cucharada de masa, hacemos un pequeño hueco en ella y añadimos una cucharadita de mermelada de fresas. Terminamos de rellenar la cápsula con otra cucharada de masa.

Dejamos en el horno durante unos 18 o 20 minutos. Enfriamos y ¿tomamos con una tacita de cava?
Feliz fin de semana.

lunes, 2 de junio de 2014

GUISO DE CORDERO CON SALSA DE LIMÓN





¿Recuerdas esta ensalada de cuscús? Cuando te la presenté te dije que en la foto aparecía sola porque el guiso de cordero que la acompañaba había volado. No me había dado tiempo a fotografiar el plato completo. Bien, aquí tienes el guiso. La carne de cordero es un poco especial porque o te encanta o la odias. No hay medias tintas con él. Es el fuerte sabor de la carne el que echa a muchas personas para atrás pero en esta receta desaparece completamente por la acidez del vino blanco que vamos a usar y por el zumo de limón que añadimos al final. Y luego está el toque refrescante del eneldo.

Con esta receta participo en el Reto de junio de Cocineros del Mundo en Google+ en el apartado de Salado.

Ingredientes para 4 personas:

1 1/2 kg de cordero en trozos
3 zanahorias medianas en trozos
1 cebolla grande cortada en juliana
aceite de oliva
300 ml de vino blanco
2 hojas de laurel
1 rama de romero
comino
1 huevo
zumo de 1 limón
eneldo picado





Secamos los trozos de cordero muy bien antes de rehogarlos en una cazuela con aceite de oliva. Dejamos que tomen color solamente. No queremos que se hagan aún. Si tu cazuela no es muy grande probablemente tengas que sellar la carne por tandas. Reservamos.

Una vez hemos retirado el cordero es el turno de la cebolla y las zanahorias. Salamos. Las rehogamos raspando la superficie de la cazuela con una cuchara de madera para levantar el "repegado" de la carne. Ya verás que las cebollas empiezan a tomar un bonito color tostado que le dará a la salsa un color fabuloso. Añadimos el laurel, romero y comino antes de verter el vino blanco. Dejamos que reduzca y se evapore el alcohol.

Incorporamos la carne y los jugos que haya soltado mientras la teníamos reservada. Dejamos que cueza entre 45 y 60 minutos o hasta que veas que ya está blanda. No creo que necesites más líquido pero si ves que empiezas a quedarte sin salsa, puedes añadir un poco de agua.






Retiramos la carne y las zanahorias. Las dejamos en una fuente tapadas. Ahora hay que dedicarle un poco de tiempo a la salsa. Batimos el huevo y vamos a añadir un poco de la salsa caliente dando vueltas para evitar que el huevo se cuaje. Vertemos sobre el resto de la salsa removiendo continuamente. Añadimos el zumo de limón y salpimentamos.

Incorporamos la carne a la cazuela de nuevo y dejamos que cueza todo un par de minutos más. Antes de servir añadimos el eneldo.

Si dejas que el guiso repose un día en la nevera verás que gana en sabor. Un cuscús, arroz, unas patatas asadas o una ensalada de naranja son el acompañamiento perfecto de este guiso.